"...y me dijo: Muy amado, no temas; la paz sea contigo; esfuérzate y aliéntate. Y mientras él me hablaba, recobré las fuerzas, y dije: Hable mi señor, porque me has fortalecido". Daniel 10:19. A veces podemos sentirnos agobiados, tristes hasta deprimidos por las dificultades de la vida. Daniel se sentía debilitado, pero la fortaleza divina entró en él para darle aliento. Si buscas auto motivarte puedes lograr algo de fuerza para ti mismo. Pienso que Dios nos ha dado la capacidad de estimularnos a nosotros mismos, pero esto es insuficiente y para lo poco que te servirá. Si pones en Él tu confianza y tu esperanza, pues obrará en favor tuyo y te bendecirá, pues opera no de acuerdo a tus capacidades, sino a las suyas. Y el plan del Creador no es sólo bendecirte aquí temporalmente, sino llevarte a su Presencia donde obtendrás la gloria eterna. Claro que de ti depende entre escoger una pequeña cisterna de poder que está en ti mismo, o una que tiene un manantial inagotable que Él quiere poner a tu disposición. Dice la biblia: "Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua". Jeremías 2:13. Nuestra capacidad para fortalecernos por nuestra propia cuenta y de auto motivarnos es comparada como una cisterna rota en relación "con esa fuente de agua viva" que es Dios. No te conformes con poco, cuando tienes todo el poder inagotable del cielo para fortalecerte. Búscalo.
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