“Porque tú nos probaste, oh Dios; nos ensayaste como se
afina la plata. Nos metiste en la red; pusiste sobre nuestros lomos pesada
carga. Hiciste cabalgar hombres sobre nuestra cabeza; pasamos por el fuego y
por el agua, y nos sacaste a abundancia”,
Sal. 66:10-12.
La vida cristiana es una de las experiencias más
maravillosas y sublimes que el creyente pueda tener. Dios siempre está a
nuestro lado, sus promesas son para bendición nuestra. Él, tiene un plan
maravilloso para nuestras vidas, es lamentable que mucha gente no lo entienda
así, sobre todo cuando experimenta pruebas y dificultades. Creo que a nadie le
gusta padecer, a nadie le gusta sufrir, pero como dice la biblia: “Y sabemos
que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los
que conforme a su propósito son llamados” (Ro. 8:28), creo que el Señor no impedirá
que pases por experiencias difíciles y hasta dramáticas, pero Él estará contigo
para ayudarte y fortalecerte. El salmista describe una situación particular en
la vida de su pueblo. Si uno lee las Sagradas Escrituras descubrirá que el
pueblo de Israel pasó por situaciones bien complicadas. Desde que fueron
esclavos en Egipto liberados providencialmente por mano de Moisés, estando
luego en la tierra prometida, a causa de su rebeldía y apostasía fueron llevados
al cautiverio, experimentaron 70 años de desolación, pero retornaron a su
territorio. Hoy es un pueblo pequeño rodeado de enemigos como son los países
árabes que lo quieren desaparecer del mapa, pero no pueden porque Dios los
protege. Y sabemos por las profecías
bíblicas que finalmente Dios sacará cara por su pueblo Israel y todos sus
enemigos serán diezmados. Si lees Ezequiel 38 y 39 que son pasajes proféticos
nos hablan del plan de Dios de destruir a los ejércitos enemigos de Israel, y te
darás cuenta que este diminuto pueblo no está desamparado.
Por otro lado, la vida del cristiano sobre este mundo es
similar, sólo por el hecho de creer en Cristo como Señor y Salvador, miles de
cristianos han sido muertos. Las persecuciones a cristianos empezaron con el
César Nerón en el año 64 d. C. Éste los hizo responsables del incendio que
destruyó Roma en el año 64 y por eso los persiguió. Gozaron de algunos momentos
de paz en que el número de los cristianos aumentaba en las grandes ciudades. No
vivían siempre en las catacumbas (cementerios romanos). Allí simplemente se
escondieron alguna vez. Lo normal era que se juntaran a celebrar sus cultos en
las casas. Tampoco todos los emperadores persiguieron a los cristianos. Hubo
gente más tolerante y otros más feroces (como Decio, Valeriano y Diocleciano).
Uno de los que más interés puso contra los cristianos fue el emperador Decio,
ya que al llegar al poder, publicó un edicto en el que obligaba a todos los
habitantes del imperio romano a realizar un sacrificio a los dioses romanos.
Una vez realizado el sacrificio se les daba un certificado, ¡Imagínate! Un certificado
como si fuera un premio por sacrificar a un cristiano. Muchos de ellos, ante el
temor de morir sacrificaron a los dioses y por tanto se apartaron de la
Iglesia, porque habían cometido un grave pecado que se llama apostasía (renegar
del Dios Cristiano). Otros fueron más astutos y consiguieron el certificado sin
sacrificar a los dioses. Los Cristianos
fueron perseguidos porque creían en el Dios de los judíos que se reveló por
medio de Cristo. Sin embargo, también fueron perseguidos porque:
- Se negaban a hacer el servicio militar.
- No iban al circo.
- No adoraban al emperador, solo a Dios.
- Mucha gente los veía como personas raras, sus reuniones
eran de contenido dudoso.
- Fueron acusados de infanticidas (de matar niños
pequeños), de antropofagia (es decir canibalismo) y de graves desórdenes
morales.
- Fueron acusados de ateos y de ir contra las costumbres
romanas, porque los romanos eran politeístas y los cristianos monoteístas.
- Fueron acusados de quemar Roma, año 64 d. C.
- Los intelectuales de la época acusaban al Cristianismo
de ser una doctrina absurda que era impensable para la época. Les parecía
absurdo que un Dios se hiciera hombre, les parecía absurdo que ese Dios muriera
en la cruz. Más absurdo les parecía la idea de la resurrección ya que ellos
creían en la inmortalidad del alma pero no en la resurrección.
¿Sabes que los cristianos siguen siendo perseguidos en
todo el mundo actualmente?: La International Society for Human Rights, una ONG
domiciliada en Fráncfort, Alemania, estima que el 80% de la discriminación
religiosa que actualmente tiene lugar en el mundo está dirigida contra los
cristianos. Y de acuerdo con el Center for the Study of Global Christianity del
Gordon Conwell Theological Seminary, una institución evangélica situada en
South Hamilton, Massachusetts, más de 100.000 cristianos han sido asesinados
cada año de los trascurridos entre 2000 y 2011, lo que supondría la muerte de
once cristianos cada hora durante ese periodo. Y claro, la persecución continúa,
porque esto es profético, Pablo dijo: “Y también todos los que quieren vivir
piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución” 2 Ti. 3:12. Sí, el Señor
permite que los que le aman y le siguen experimenten todas estas cosas que
nadie que tenga a Cristo en su corazón se atrevería a pasar, pero tenemos la
esperanza como dice el Salmista: “….nos sacaste a abundancia” (Sal. 66:12). No
pierdas tu fe mi querido hermano, no te amilanes, no retrocedas como aquellos
que aman más al mundo y su vida que a Cristo, sigue aferrándote a Él, porque el
premio y la corona está al final del camino: “Pero nosotros no somos de los que
retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma”
(He. 10:39).
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