martes, 26 de agosto de 2025

UNA SOCIEDAD SIN VALORES Y SIN DIOS

 


Vivimos en una sociedad que, cada vez más, parece haber perdido sus valores. Lo material ocupa el lugar más importante: se mide el éxito por lo que uno tiene y no por lo que uno es. La apariencia se ha convertido en un dios moderno, mientras lo sórdido y lo inmoral se celebran como libertad. Pero detrás de todo esto se esconde un vacío profundo: la falta de fe en Dios.

La Biblia nos advierte sobre estas realidades. En 2 Timoteo 3:1-2 leemos: “En los últimos días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos...” Estas palabras parecen describir con claridad nuestra actualidad: una generación seducida por lo superficial, que corre el riesgo de perder lo más valioso: la vida eterna.

Los peligros de esta sociedad sin valores son evidentes: familias destruidas, jóvenes sin rumbo, violencia en aumento y un corazón humano endurecido. Cuando el hombre se aleja de Dios, inevitablemente cosecha dolor, pues fuera de Él no hay esperanza verdadera.

Sin embargo, el mensaje de Dios no es de condena, sino de amor y restauración. Jeremías 29:13 dice: “Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón.” El Señor extiende su mano hoy para darnos un nuevo comienzo.

Por eso, hoy más que nunca necesitamos volver a Dios. No pongamos nuestra confianza en lo pasajero, sino en Aquel que nos ofrece vida abundante y eterna. El dinero, la apariencia y los placeres nunca llenarán el vacío del corazón, solo Cristo puede hacerlo.

Te invito a reflexionar: ¿En qué estás edificando tu vida? Si hoy decides buscar a Dios de todo corazón, Él te recibirá con brazos abiertos. La verdadera paz, la verdadera esperanza y la verdadera vida solo se encuentran en Jesús.

No hay comentarios:

UNA SOCIEDAD SIN VALORES Y SIN DIOS

  Vivimos en una sociedad que, cada vez más, parece haber perdido sus valores. Lo material ocupa el lugar más importante: se mide el éxito p...