NO PERDEMOS NADA

EL CREYENTE PUEDE PERDER BATALLAS, PERO NO LA GUERRA, PUEDE PERDER OPORTUNIDADES, PERO NO SU DESTINO ETERNO; PERDER AMIGOS, PERO NO AL AMIGO VERDADERO, PERDER LA ALEGRIA, PERO NO LA DICHA ETERNA, PERDER SUS BIENES TERRENOS, PERO NO SUS RIQUEZAS ETERNAS, PERDER SU EXISTENCIA SOBRE ESTE MUNDO, PERO NO LA VIDA ETERNA. AL FINAL DESCUBRES QUE EL CREYENTE NO PIERDE NADA, PORQUE EN CRISTO TODAS LAS COSAS NOS AYUDAN A BIEN Y SOMOS LLAMADOS A SER "MAS QUE VENCEDORES".